"Señorita Caridad, de lánguida normalidad".
" Lánguida normalidad " Sin ahondar en religiones, Que antaño nos relataron, Como con Jesús el Cristo, El Oráculo de Delfos, O los budistas y los de oriente, Afirmo como un letrado: ¿Dónde se escondió, Srta. Compasión? No es asunto político, Sino de sociedad, De los medios, y a las bravas, De unos tontos y el poder: Se sirvieron del dinero, Que era para su pueblo, Se lavaron todos las manos, Y nos dejaron desnudos, De ropajes ligeros, Sin vestimenta el alma. Gritan por los altavoces, Jalean en los plasmas, Que si adalides de libertad, Y yo digo, ¡Caridad! ¡Por favor, Caridad! Doña Comprensión, Srta. Caridad, Hermana de la Comprensión, ¿Están perdidas o en captura? En esta Edad de Piedra, Se acabó esa risa noble, Ganaron los fariseos: De la mentira y de la falsa admiración. Mucho Dios, poca decencia, Muchas palabras que nos sobran, y gran pérdida de ilusión. Nos hemos hecho grandes de repente, Adiós, adiós, inocencia. Fútbol como "alibi", Y eructos llenos de insult...